La personalidad de Chamberí: un espacio único para acoger empresas
Para muchas compañías, la ubicación es un factor clave para que su negocio funcione eficientemente, no hay lugar a dudas. Si bien es cierto que hace unos años muchas empresas se trasladaron a polígonos industriales o en la periferia, hoy estamos asistiendo a una inversión de esta tendencia, marcada sobre todo por la sostenibilidad. Los beneficios que ofrece una ubicación céntrica son múltiples, pero el más importante afecta a la facilidad de acceso al lugar del trabajo, ya que se evita el desplazamiento en coche.
Si observamos la tendencia de la capital en los últimos años, encontramos un barrio que ha vivido una profunda transformación y que se ha convertido en el más codiciado por las empresas e inversores. Se trata del distrito de Chamberí.
Conformado por los barrios de Trafalgar, Arapiles, Gaztambide, Almagro, Rio Rosas y Vallehermoso, el lugar forma parte de llamada almendra central de la ciudad. Aunque en sus calles se respira su pasado aristocrático, hoy en día es una zona que cuenta con todo tipo de servicios.
Ubicación céntrica y servicios prime
En Colonial contamos con activos situados en la zona, como por ejemplo Miguel Ángel 23. Estar en un edificio de oficinas de estas características significa presumir de visibilidad en uno de los mejores corners de la ciudad, disfrutando de una insuperable oferta de servicios y transportes.
Su situación en chaflán le otorga una excelente visibilidad del Paseo de la Castellana, centro de negocio más emblemático de la capital donde poder hacer networking y crear nuevas oportunidades.
Pero no solo eso, porque Chamberí es un lugar que pide para ser vivido. Cuenta con áreas verdes ideales para pasear y relajarse después de un largo día de trabajo, como el Parque Santander, los Jardines de Enrique Herrero o el Centro de Ocio y Deportes Tercer Deposito del Canal Isabel II.
Numerosas son también las zonas de ocio donde desconectar y cuidarse: salas de cine, gym, el Museo Sorolla y varios teatros como el Teatro del Canal, de la Abadía, de Galileo y los teatros de Luchana.
El barrio aglutina en calle Ponzano, en la Plaza Olavide y alrededor de la Castellana la mejor oferta gastronómica de la capital con restaurantes gourmet, tabernas tradicionales y bares.
Su localización, las buenas comunicaciones y el ambiente exclusivo pero discreto han hecho que este distrito se adapte a las necesidades cambiantes de las empresas y de las personas.
