Casos de éxito en la transformación sostenible de edificios de oficinas
La transformación sostenible de los edificios comenzó como una tendencia minoritaria en un contexto de indiferencia generalizada hacia los ecosistemas, el clima y el planeta en general. Poco a poco, con el esfuerzo de empresas comprometidas con el medioambiente y un cambio en el nivel de concienciación social, dicha transformación ha ido cobrando cada vez más relevancia hasta convertirse en uno de los baluartes de la industria. Sin embargo, y aunque cada vez más edificios cuenten con características sostenibles, existen ciertos casos en los que el impacto positivo ha sido particularmente trascendente. Obras arquitectónicas que representan el mayor de los compromisos con el planeta.
Capilla de Kamppi, Helsinki
La Capilla de Kamppi, también conocida como la Capilla del Silencio debido al hecho de que fue diseñada con el objetivo de convertirse en un espacio de tranquilidad en mitad de una de las áreas más agitadas de la capital finlandesa, es uno de los ejemplos más paradigmáticos de cómo un par de decisiones de arquitectura y de diseño pueden suponer una diferencia enorme en términos de sostenibilidad. En este caso, se trata de la elección de la madera como material íntegro de construcción, el cual cuenta con una huella de carbono mucho menor que otros de los materiales habituales, y del seguimiento del minimalismo. Es un edificio icónico que representa la nueva arquitectura.
The Edge, Ámsterdam
Uno de los casos más populares de transformación ecológica de edificios. Hasta tal punto que suele considerarse el edificio más sostenible del mundo: cuenta con un sistema de iluminación LED inteligente que opera en función de la luz natural y el movimiento, tecnología de gestión de la energía, mecanismos de recolección y reutilización del agua de lluvia, paneles solares en el techo como fuentes energéticas y espacios de vegetación abundantes que satisfacen las necesidades biofílicas de los usuarios. Además, fue ideado según criterios bioclimáticos, lo que significa que su localización, su orientación, su ventilación y muchos otros factores responden a las circunstancias climáticas del lugar.
One Angel Square, Mánchester
También en Europa, concretamente en la ciudad inglesa de Manchester, encontramos otro de los símbolos de la transformación sostenible de edificios. Es el One Angel Square, sede de la empresa The Co-operative, una construcción que presume de una fascinante fachada de vidrio de triple capa que lleva el aislamiento térmico hasta el siguiente nivel. Esto, junto con una priorización máxima de las tecnologías verdes a través de turbinas de gas de microcogeneración y paneles fotovoltaicos instalados en el techo, consiguen una disminución extraordinaria de las emisiones de dióxido de carbono de la fase operativa del edificio. Es una referencia en eficiencia energética mundial.
Pixel Building, Melbourne
Pixel Building, localizada en la ciudad australiana de Melbourne, es una construcción muy peculiar conocida principalmente por su estética, la cual destaca sobremanera en un entorno arquitectónico sobrio debido a sus geometrías y sus colores. No obstante, lo que no es tan conocido, y es quizás incluso más brillante, es que Pixel está fabricado con materiales reciclados, dispone de un sistema de energía renovable basado en paneles solares y turbinas eólicas y posee un sistema de tratamiento de aguas grises y negras para su reutilización. O dicho de otra forma: es un edificio de oficinas orientado completamente y desde todos los ángulos posibles a la sostenibilidad medioambiental.
The Crystal Tower, Dubái
Dubái, la ciudad más emblemática de los Emiratos Árabes Unidos, está caracterizada enteramente por la innovación tanto tecnológica como arquitectónica. Un buen ejemplo de esto lo representa The Crystal Tower, un edificio diseñado de principio a fin bajo una óptica bioclimática, lo que implica que en su confección se han tenido en cuenta las condiciones tan especiales del clima de la región. Entre otras cosas, incluye un conjunto de paneles solares integrados en su fachada para aprovechar las altas temperaturas, así como un sistema de enfriamiento por agua de mar que reduce la dependencia de las fuentes de refrigeración convencionales de mayor huella de carbono.
