El uso de eco-materiales en la rehabilitación de oficinas
En los últimos tiempos, muchos ciudadanos han introducido en su vida diaria pequeños gestos y acciones que contribuyen a la preservación del medio ambiente, como por ejemplo, abrir las persianas para no utilizar la iluminación artificial a pleno día o mantener las estancias a una temperatura adecuada para no malgastar energía. Sin embargo, también existen otras estrategias para reducir el efecto invernadero en el momento mismo de la construcción o rehabilitación de los edificios. No importa si éstos están destinados a viviendas o espacios de trabajo, sólo se trata de encontrar los materiales de construcción más adecuados y menos contaminantes para contribuir tanto a la protección del planeta como al bienestar personal. Cuando se plantea la rehabilitación sostenible de un edificio de oficinas, por ejemplo, se debe conocer qué eco-materiales existen para escoger los más adecuados en cada caso. Además, muchos de estos materiales están designados con etiquetas que aseguran su sostenibilidad. Uno de los principales es la madera con sello FSC, que gracias a su versatilidad y altas cualidades ecológicas, se convierte en un gran aliado para todo tipo de estancias y elementos. Este sello, además, señala que el producto ha sido gestionado de forma responsable con el medio ambiente, que es beneficioso para la sociedad y, también, que contribuye a la viabilidad de las economías de los bosques de todo el mundo. En relación a los acabados de la gran mayoría de estancias, las paredes y los techos tendrán que pintarse con pintura plástica al agua lisa sin plomo y sin compuestos orgánicos volátiles (COVs), porque es la única que evita la emisión de gases contaminantes a la atmósfera. Sin embargo, en las estancias más húmedas, como los baños, se debe optar por el uso del gres para revestir las paredes y los suelos. En la fabricación de este gres se usa un 80% de material reciclado y, además, el material dispone de gran dureza y alta durabilidad. Para reconocer a las empresas constructoras e inmobiliarias el uso de eco-materiales y otras estrategias que contribuyen a la protección del planeta en sus edificios, se han desarrollado certificaciones internacionales que así lo señalan. Por ejemplo, la última gran reforma de Colonial, el complejo de oficinas TGA (Travessera de Gràcia 11, Amigó 11), ha recibido dos certificaciones LEED Oro. Esta certificación, desarrollada por el Consejo de la Construcción Verde de Estados Unidos, señala el uso de estrategias sostenibles como la eficiencia energética, el consumo de agua, las emisiones de dióxido de carbono o el impacto ambiental de los materiales empleados en la construcción o rehabilitación de edificios. Imagen por gufm