Oficinas que nos diseñan
Winston Churchill solía decir que “nosotros diseñamos nuestros edificios y, luego, son ellos los que nos dan forma a nosotros”. De este modo explicaba que el diseño del Parlamento inglés había influido en el funcionamiento del sistema político británico. Si seguimos esta lógica, podríamos decir que somos nosotros quienes diseñamos nuestra oficina, pero luego es ella la que nos da forma a nosotros, ya que su diseño influye decisivamente en nuestro modo de trabajar. En este post, queremos analizar algunas de las tendencias de 2019 en diseño de oficinas:
Espacios colaborativos. Sabemos que compartir nuestro trabajo con los demás es de gran ayuda, ya que nos permite revisar proyectos y tareas desde otros puntos de vista, lograr una idea diferente que nos saque del bloqueo, para así poder priorizar tareas más urgentes. Hace años que los despachos y cubículos individuales quedaron obsoletos, ahora, si queremos que el trabajo colaborativo funcione de verdad, los espacios deben estar acondicionados para ello: mesas grandes donde quepan varios trabajadores, áreas comunes amplias y un comedor que invite a hacer una pausa a medio día para comer con toda la oficina.
Espacios de concentración. Colaborar es indispensable, pero, a veces, necesitamos espacios tranquilos que nos permitan desarrollar nuestra concentración al trabajar, al estar en frente del ordenador o realizar una llamada sin incomodar al resto de la oficina. Estos lugares suelen imitar el diseño de una librería con lo cual, de manera espontánea, las personas tienden a trabajar en silencio.
Diseño biofílico. Se trata de que la oficina cuente con elementos naturales que nos ayuden a liberar el estrés. Sin embargo, este tipo de diseño va más allá de colocar una simple planta, es indispensable diseñar espacios que ayuden a las personas a desarrollar su trabajo e influya en su bienestar a partir de tres principios básicos: crear distintos ambientes como zonas más vibrantes que ayuden a pensar y provoquen nuevas ideas creativas u otras áreas más tranquilas que inviten a la relajación y la concentración; utilizar formas análogas con la naturaleza e implementarlas en el diseño de la oficina, así como la implementación de grandes ventanales que permitan la entrada de luz natural y aire fresco que ayuden a despejar los sentidos.
Cultura de la adhocracia. Este tipo de diseño se centra en fomentar la creatividad de los empleados y trata de generar entornos flexibles con lugares que estimulen a los empleados. De esta forma, se establecen espacios dedicados a la realización de actividades lúdicas que no están directamente relacionadas con sus funciones de trabajo. Estos espacios de descanso y entretenimiento pretenden dar un respiro a los trabajadores para que desconecten de sus actividades rutinarias, de forma que puedan regresar a las mismas y dedicarse plenamente sin sensación de fatiga. Siguiendo esta línea de diseño se encuentra la propuesta de valor que propone Utopicus, donde se integran espacios flexibles en los cuales se combinan distintas actividades y eventos que impulsen la innovación, la colaboración, la creatividad y el emprendimiento.
A modo de resumen, resulta evidente que en materia de diseño de oficinas no hay una fórmula exacta para todos, pero el diseño de los espacios de trabajo puede incidir directamente en la cultura empresarial y aumentar el éxito laboral de los empleados.