El internet de las cosas y su revolución en las oficinas
El internet de las cosas (IoT) sigue revolucionando la sociedad en todos los ámbitos. La tecnología está en la búsqueda continua de ofrecer mayor velocidad y mejor conectividad a los usuarios, y el LI-FI (Light Fidelity) podría ser una de las tecnologías que se empleen para revolucionar las oficinas junto con la tecnología 5G.
El LI-FI es una tecnología inalámbrica de transmisión de datos que utiliza la luz para enviar información, a diferencia del Wifi que lo hace a través de ondas electromagnéticas. Es 100 veces más rápido que el WIFI y tiene la capacidad de transmitir mucha más información por segundo. Gracias a esta nueva tecnología, conectarse a Internet puede ser tan fácil como orientar el teléfono móvil hacia una farola, una luz o un televisor LED. A pesar de ser una tecnología innovadora, futurista, de fácil instalación y que no afecta al uso normal de la luz que la proporciona, el LIFI no pretende ser un rival del WIFI, por lo menos no ahora, ya que su alcance se ve condicionado al cono de luz.
¿Y qué pasa cuando semejante tecnología llega a las oficinas?
Philips empezó, a principios del pasado 2018, a hacer pruebas de la tecnología LIFI en oficinas. En primer lugar, sorprendió la fácil instalación del sistema, que no requiere cableado propio, si no que se incorpora a la estructura luminosa del espacio. Además, pasadas unas semanas, se pudo comprobar que dicho sistema permitía un envío y recepción de datos mucho más seguro, haciendo del mismo un gran aliado para todas aquellas empresas que manejan información sensible. A esto se añade el hecho de que el alcance no traspasa las paredes y, por lo tanto, impide la conexión desde el exterior, que es muchas veces el motivo de que se filtre o se pueda interceptar esta información.
La ventaja del uso del LIFI en oficinas también se respalda en el hecho de que el sistema proporciona una velocidad 100 veces más rápida que la del WIFI, haciéndolo idóneo para espacios en los que mucha gente tenga que conectarse a Internet no sólo con uno, si no con varios dispositivos, y, además permite la simultaneidad de usos sin afectar a la calidad de la iluminación de las instalaciones.
A todo esto se suma el ahorro energético que supone el uso de este innovador sistema, que no sólo aumenta la eficiencia energética, si no que también mejora notablemente las operaciones que se llevan a cabo, proporcionando datos detallados sobre la actividad que se realiza y permitiendo, mediante los controles remotos del sistema, ajustar los niveles de iluminación y programar los horarios de la misma.
La tecnología lleva años llegando para revolucionar nuestro día a día y las oficinas no iban a ser una excepción. A modo de resumen, el LI-FI es una tecnología muy interesante y con mucho potencial para hacer más eficiente, rápida y segura la conectividad en espacios de trabajo.